Los vacíos en la regulación marítima de Colombia no solo afectan nuestra interacción con otros países, sino que internamente complica el desarrollo de nuestras actividades marítimas y portuarias. El canal de acceso por al Puerto de Barranquilla no cuenta con las condiciones para recibir buques. En múltiples ocasiones las naves se varan por sedimentación del Rio Magdalena. En ese sentido, el Gobierno nacional, por necesidad y presión de los comercializadores, industriales y puertos decide tomar cartas en el asunto de este cuello de botella no sin antes destapar controversia en los costos del contrato para asegurar el flujo de operaciones marítimas.
El vacío en la regulación nacional del servicio de pilotaje una embarcación permanente en el territorio nacional generó una alerta por parte del Puerto de Barranquilla, quien advierte a Asoportuaria sobre el sobrecosto que generaría el pago de servicios de pilotos prácticos en el presupuesto de dragado permanente que se efectuaría y cómo este representaría un 28% de los USD 2 millones.
Anteriormente los dragados efectuados al canal era reactivos, por lo cual su duración no superaba los 15 días. Esto a un costo de servicio de pilotos prácticos aproximado de USD 7,388 no representaba un costo tan representativo en los contratos de dragado.
El 27 de diciembre del 2019 se envía una comunicación a la Dimar en la que solicita a la autoridad marítima revisar el servicio de practicaje, fondeo, inspectores y demás costos asociados, teniendo en cuenta las necesidades industriales y portuarias de la región. Igualmente se manifiesta que el costo «excesivo» de los pilotos podría poner en riesgo el interés de las empresas dragadoras en participar de la convocatoria que se abrirá para dragar el canal de acceso durante el 2020.
Igualmente, Asoportuaria solicita considerar que, en otros países sudamericanos como Perú, se da la situación que una vez el buque ingrese al mismo puerto cierta cantidad de días, ya no necesita tener piloto práctico.
El Estado Colombiano, bajo la Ley 658 de 2001, regula la actividad marítima y fluvial de practicaje como servicio público en áreas marítimas y fluviales. Esta norma, establece que cuando un buque de bandera nacional o extranjera ingresa a un puerto de Colombia, deberá estar acompañado de un práctico, quien se encarga de guiar a la embarcación hasta llegar a su zona de amarre para la respectiva operación de carga y descarga.
En ese orden de ideas, las embarcaciones que recalen en el puerto de Barranquilla deben entrar con un piloto práctico hasta su muelle de destino, incluyendo las dragas que arriben a remover sedimento del canal de acceso al Puerto.
A este vacío en la regulación que afectaría el costo del proyecto la DIMAR responde con fijar una tarifa del servicio de pilotos prácticos durante el tiempo que dure el dragado de no más de USD 123.556, según informa el Heraldo. Igualmente, la DIMAR explica que el dragado sería de 250 días y 875 ciclos de ingreso y salida de la draga, por lo que la remuneración para el piloto práctico por este concepto sería de US$141,49 sin involucrar otra actividad conexa, según confirmó El Heraldo.
Convocatoria para contratar el dragado
FINDETER, la Financiera de Desarrollo Territorial Abrió la convocatoria par los trabajos de mantenimiento del canal de acceso con un costo aproximado de COP 23.580 Millones que hacen parte de las vigencias futuras aprobadas por el Gobierno para garantizar la navegabilidad del Magdalena durante el 2020.
Anteriormente, Cormagdalena y FINDETER habían suscrito un contrato interadministrativo por COP 38.999 Millones para la recuperación del canal navegable del Río Magdalena entre el puerto petrolero de Barrancabermeja y el municipio de Pinillos, y los 22 kms de canal de acceso al Puerto de Barranquilla, hasta la desembocaruda del Río en Bocas de Ceniza.
