Después de la decisión rotunda de la OMI de regular las emisiones de SOx en el 2020, la atención ahora se vuelca en qué la OMI decidió adoptar un acuerdo sobre las emisiones de CO2 del transporte marítimo, que también estuvo en discusión la semana pasada.
Aunque al día de hoy, la OMI no ha reportado su posición. Observadores de la MEPC (Marine Environmental Protection Comitte) de grupos ambientalistas le dijeron a The Loadstar, que el lenguaje utilizado por los delegados de este año fue diferente al del año pasado, cuando los Estados del pabellón – en particular aquellos que representan los llamados banderas de conveniencia (flags of convenience) – parecían tener la intención de limitar las emisiones de CO2.
«Lo que vimos esta semana en Londres era una aceptación por parte de los Estados de abanderamiento que algo se tiene que hacer, y que tiene que suceder más rápido de lo que se aprecia – aunque no había un consenso como tal en los niveles de emisión reales, no obstante siendo utilizado el lenguaje en el debate plenario fue muy alentadora «, mencionó uno de los observadores.
La OMI ha llamado previamente a un enfoque de tres pasos para la reducción de emisiones – la recopilación de datos, seguido del análisis de datos y posteriormente la toma de decisiones de las medidas a tomar – pero esta semana pareció haber un cambio radical en ese enfoque, pidiendo un grupo de trabajo discutir posibles soluciones, lo que iría en paralelo con la recolección y análisis de datos.
Sin embargo, la fuente también advirtió que esto podría ser un movimiento para detener la introducción de nuevas normas de emisión de CO2 lejos del ojo público.
Dijo: «Siempre hay un peligro de que esto sea una estrategia para matar cualquier regulación por estrangulamiento en la etapa de la comisión – a estas personas les gusta escoger sus batallas.
«¿Por qué oponerse a ella en el ojo público cuando en silencio puede acabarla en un grupo de trabajo?»
Fuente: TheLoadstar
