China ha consolidado su posición como líder mundial en la construcción de buques portacontenedores, controlando un impresionante 68,5% del libro de pedidos global en términos de capacidad TEU (unidad equivalente a veinte pies). Este cambio marca un giro dramático en la industria, ya que Corea, el antiguo líder, ahora ocupa un distante segundo lugar con una cuota de mercado del 23,3%.
Los astilleros chinos superaron por primera vez a sus homólogos coreanos en 2015 y han ampliado su dominio, especialmente en los últimos años. Solo en 2024, los astilleros chinos aseguraron pedidos por 3,61 millones de TEU, superando con creces los 0,66 millones de TEU de Corea. Estos pedidos, junto con proyectos estratégicos de expansión de capacidad, han extendido el pipeline de producción de China hasta 2030.
Costos y capacidad: las claves del éxito de China
El dominio de China se atribuye a sus precios competitivos y a fuertes inversiones en la capacidad de sus astilleros. Grandes actores chinos como New Times Shipyard (NTS), Yangzijiang (YZJ) y CSSC Group han llevado a cabo masivos proyectos de expansión, creando espacios de construcción disponibles para los próximos años. Algunos astilleros, como Guangzhou International Shipyard, incluso han cambiado de fabricar otros tipos de buques a enfocarse exclusivamente en portacontenedores.
Además, asociaciones como la de Hengli Group con MSC han revitalizado instalaciones como el antiguo astillero STX Dalian, destacando el compromiso de China con la creciente demanda global.
Los astilleros coreanos se adaptan al nuevo panorama
Aunque Corea sigue siendo un jugador importante en el mercado, su cuota está disminuyendo de forma constante. Los astilleros coreanos aún atraen pedidos para grandes buques de línea principal y buques de tamaño medio, con astilleros más pequeños como HJSC y Daehan experimentando un renovado interés. Cabe destacar que Hanwha Ocean ha regresado al mercado de portacontenedores, impulsado por el aumento de los precios de construcción.
Sin embargo, Corea enfrenta desafíos para mantenerse competitiva frente a las ventajas de costo y la gran capacidad de China. Los expertos de la industria predicen una mayor erosión de la cuota de mercado coreana una vez que el actual auge de pedidos disminuya.
Japón mantiene una presencia modesta
Fuera de China y Corea, Japón conserva una modesta cuota del 6,4% del libro de pedidos global de buques portacontenedores. Astilleros como JMU e Imabari continúan atrayendo pedidos, especialmente de transportistas como Ocean Network Express (ONE), aunque muchos de estos contratos también se están trasladando a constructores chinos y coreanos.
Estrategias de pedido diversas
Aunque el dominio de China es evidente, las preferencias de los transportistas globales varían. Los astilleros chinos han recibido importantes pedidos de grandes transportistas como MSC y Hapag-Lloyd, ambos anteriormente inclinados hacia los constructores coreanos. COSCO Group, una importante naviera china, ha reforzado sus capacidades internas de construcción naval, consolidando aún más el ecosistema de construcción naval de China.
En contraste, algunos transportistas permanecen leales a sus países de origen. HMM sigue apoyando a los astilleros coreanos, mientras que las navieras taiwanesas como Evergreen y Yang Ming distribuyen sus pedidos entre Taiwán, Corea y Japón, evitando una dependencia excesiva de China debido a preocupaciones geopolíticas en la región.
Un panorama global cambiante
El rápido ascenso de China como potencia dominante en la construcción naval destaca la dinámica cambiante de la industria marítima global. Con sus incomparables ventajas de costos y expansión de capacidad, China está posicionada para mantener su liderazgo en el futuro previsible. Mientras tanto, Corea y Japón deberán adaptarse a esta nueva realidad, buscando nichos y estrategias para seguir siendo competitivos en un mercado cada vez más consolidado.