Trump prepara medidas de apertura en materia comercial
Tras su toma de posesión el lunes, el presidente Donald Trump puso su mirada en una reestructuración dramática del comercio global, con el objetivo de imponer aranceles significativos a socios comerciales clave, entre ellos Canadá, México y la Unión Europea.
Estas acciones marcan una continuación de su campaña en favor de una agenda de “Estados Unidos primero”, cuyo objetivo es reducir los déficits comerciales e impulsar la manufactura nacional. Sin embargo, la implementación y los posibles impactos de estos aranceles han infundido una mezcla de optimismo e incertidumbre en los mercados globales.
Los aranceles se retrasan a medida que la estrategia se enfoca
En su primera noche en el cargo, Trump anunció planes para imponer aranceles de hasta el 25% a las importaciones procedentes de Canadá y México, citando preocupaciones sobre la inmigración y los desequilibrios comerciales. Si bien inicialmente se estableció que estos aranceles comenzarían de inmediato, no se implementaron aranceles el día 1, lo que otorgó una suspensión de la ejecución a los mercados extranjeros y a las partes interesadas nerviosas.
En cambio, Trump declaró que estaba considerando el 1 de febrero como fecha límite para imponer aranceles contra Canadá y México, ordenando a las agencias federales que evaluaran las políticas comerciales existentes y el cumplimiento de acuerdos comerciales recientes como el Acuerdo entre Estados Unidos, México y Canadá (T-MEC).
Jan Hatzius, economista jefe de Goldman Sachs, comentó que los comentarios iniciales de Trump sobre el comercio y los aranceles parecieron “más benignos de lo esperado”. Este pivote notablemente más suave puede r…
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