Según la AFP y la revista semana, esta semana se reportó la incautación de aletas de tiburón más alta en los dos últimos años. 26 toneladas de aletas que corresponden a por lo menos 38.500 escualos fue hallado en dos contenedores procedentes de Ecuador a Hong Kong. Existe el indicio que desde Colombia existe el tráfico ilegal de aletas de especies vulnerables de tiburones por territorio ecuatoriano.
Las autoridades en Hong Kong aseguró que la demanda de las aletas de tiburón viene en incremento y que el año anterior (2019) la cifra record de incautación había sido 3,8 toneladas en el 2019.
Las aletas pertenecen a tiburones zorro (alopias superciliosus) o sedosos (Cahcharhinus Falciformis), dos especies consideradas vulnerables por la Unión Internacional para la conservación de la naturaleza.
Con la incautación se detuvo un hombre de 57 años que fue puesto en libertad bajo fianza posteriormente.
Las poblaciones de tiburones están sobre constante presión, principalmente por la pesca para el consumo. El modo de obtención de la aleta es por medio de la pesca del peces, el corte y la liberación de los peces mutilados al agua. Las aletas secas de tiburón son utilizadas para hacer otro tipo de sopa en el sur de China.
En Colombia se encuentra prohibida desde el 2017, sin embargo, fuentes aseguran que existe el tráfico ilegal por territorio ecuatoriano o panameño a países asiáticos. «El producto ilegal sale de Tumaco» asegura Nicolás del Castillo, Director de la AUNAP (Autoridad Nacional de Acuicultura y Pesca) durante una rueda de prensa el 30 de octubre de 2019. Igualmente afirma que no son pescadores extranjeros los responsables sino pescadores colombianos que hacen «la trampa».
El valor comercial de la aleta de tiburón en mercados asiáticos es de USD 25 a USD 300 en escasez. En algunos países de Asia aseguran que la sopa de aleta de tiburón es afrodisiaca y un símbolo de poder y lujo. Mundialmente se comercializan al rededor de 50 millones de aletas cada año pese a su posible contenido de mercurio.
«Nosotros tenemos en el país 37 especies de tiburón, que son recursos pesqueros susceptibles de explotación comercial. De esos 37, cinco están en el apéndice II de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Flora y Fauna (Cites), de la cual hace parte Colombia desde 1981. Para poder aprovechar esas especies se debe contar con el permiso Cites que expide el Ministerio de Ambiente y en la actualidad no se están tramitando», resaltó Del Castillo.
