Casi dos docenas de tripulantes a bordo de un barco de la Marina australiana que se dirige a prestar ayuda a la isla de Tonga, en el Pacífico, han sido diagnosticados con el coronavirus, lo que podría obstaculizar los esfuerzos de ayuda a la nación libre de Covid.
El ministro de Defensa australiano, Peter Dutton, dijo que 23 miembros de la tripulación del HMAS Adelaide habían sido infectados, en una entrevista en Sky News el martes. El barco partió de Brisbane el viernes con una tripulación de 600 personas y con suministros humanitarios y médicos para ayudar a Tonga tras una erupción volcánica.
Al menos tres personas murieron cuando el volcán Hunga Tonga-Hunga Ha’apai entró en erupción este mes, provocando alertas de tsunami en todo el Pacífico y cubriendo la capital tongana, Nuku’alofa, con un manto de cenizas.
Dutton dijo que el gobierno australiano estaba trabajando con las autoridades de Tonga para garantizar que la ayuda pudiera seguir siendo entregada de forma segura sin transmitir Covid a nadie en la isla. Desde el comienzo de la pandemia, Tonga sólo ha registrado un único caso de Covid-19, según la Organización Mundial de la Salud.
«Obviamente necesitan la ayuda desesperadamente, pero no quieren el riesgo del Covid», dijo Dutton, añadiendo que ya se había entregado alguna ayuda a Tonga a través de los vuelos C-17 australianos a la isla.
Por otra parte, un miembro de la Fuerza Aérea de Autodefensa de Japón que había sido desplegado para entregar la ayuda a Tonga dio positivo en la prueba del coronavirus, dijo el ministro de Defensa, Nobuo Kishi, en una reunión informativa en Tokio el martes. La persona fue sometida a pruebas en Australia tras desarrollar fiebre el lunes por la mañana y se encuentra en condición estable en aislamiento allí.
Los aviadores japoneses habían estado en tierra en el aeropuerto internacional de Fua´amotu, en Tonga, el 22 de enero, repartiendo agua potable y equipos de limpieza. Kishi dijo que hay suficiente personal disponible y que la misión de Japón no se verá afectada.
Bloqueo de COVID en el Pacífico
El brote a bordo del HMAS Adelaide se produce en un momento en que varias naciones del Pacífico están luchando por eliminar el Covid-19 en sus comunidades, y tanto Kiribati como Samoa han anunciado recientemente cierres.
Ambos países registraron menos de 100 casos combinados desde el inicio de la pandemia, según la Organización Mundial de la Salud, pero ahora están viendo un aumento constante de las infecciones. Samoa amplió su cierre hasta el jueves para su población de más de 200.000 habitantes, con horarios reducidos de apertura de supermercados, bancos y farmacias.
Al mismo tiempo, las tasas de vacunación de muchas naciones del Pacífico han quedado rezagadas con respecto al resto de la región. Mientras que tanto Australia como Nueva Zelanda han administrado a más del 75% de su población dos dosis de la vacuna Covid-19, esa tasa se ha estancado en poco más del 60% en Samoa y Tonga.
En Kiribati, menos del 40% de la población ha recibido dos dosis, por no hablar de los refuerzos, para protegerse contra la variante omicron, altamente infecciosa.