El pasado 10 de Junio Perú se convirtió en el país número 51 en firmar su adhesión al convenio internacional sobre gestión de aguas de lastre. La convención sobre manejo de aguas de lastre o BWM (Ballast Water Management) es instrumento regulatorio de la OMI fue creado con el propósito de para mitigar las amenazas a los ecosistemas marinos que generan las especies invasoras presentes en las aguas de lastre de los buques mercantes.
Para que la Convención de aguas de lastre entre en vigor se requiere que países representando el 35% de la flota mundial acepten el instrumento. Considerando la adhesión de Perú este porcentaje se eleva 34.87% por lo que se espera que antes de terminar el año se apruebe definitivamente.
El secretario general de la Organización Marítima Internacional el señor Kitack Lim, reiteró su petición para que todos los países del mundo ratifiquen este instrumento sea posible la entrada en vigor del mismo en el menor tiempo posible.
El Problema
Desde la incorporación de buques de casco de acero las naves han utilizado el agua de lastre para mantener su estabilidad, mejorar las condiciones operativas y compensar las cargas después de los movimientos de las operaciones de cargue y descargue. El uso de aguas de lastre supuso una solución para muchos de los problemas de los buques modernos no obstante también se generó un riesgo importante para el ecosistema marino.
Cuando los buques cargan y descargan agua de lastre es sus tanques están creando un medio de transporte para una multitud de especies (bacterias, microbios, pequeños invertebrados, huevos y larvas) de un lugar a otro del globo. La incorporación de estas nuevas especies en lugares distintos a su ambiente nativo por lo general causa un desbalance que puede generar daños irreversibles a las poblaciones y ecosistemas nativos.
Información tomada de “Perú se convierte en el 51º Estado en adherirse al Convenio BWM” en la página de la OMI.
