La Organización Marítima Internacional (OMI) ha adoptado un plan de acción para reducir la basura plástica, mejorando las regulaciones actuales y desarrollando nuevas medidas para su reducción y uso en el transporte marítimo internacional.
El plan ha identificado una serie de medidas para lograr su objetivo, incluido un estudio planificado sobre la basura plástica marina de los barcos, la exploración de la disponibilidad y adecuación de las instalaciones portuarias de recepción, fomentar la notificación de la pérdida de las redes de pesca y de contenedores en el mar.
También tiene como objetivo fortalecer la cooperación internacional, en particular la Organización para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y el Medio Ambiente de la ONU, así como mejorar la conciencia pública.
En un comunicado, la OMI informa: “El Plan de acción señala que la basura plástica marina ingresa al ambiente marino como resultado de una amplia gama de actividades terrestres y marítimas.
Igualmente, la OMI afirma que “Reconociendo que se necesita más para abordar los problemas ambientales y de salud planteados por la basura plástica marina, los estados miembros de la OMI acordaron acciones para completar en 2025.
«El Convenio y Protocolo de Londres de la OMI está diseñado para permitir solo el vertimiento de materiales permitidos, incluidos los generados por el dragado». Sin embargo, estos materiales deben evaluarse antes de descargarse para garantizar que materiales nocivos como los plásticos no se liberen al mar.
«La basura plástica marina tiene un impacto negativo en actividades como el turismo, la pesca y el transporte marítimo».
Se espera que IMO revise periódicamente y, si es necesario, actualice el nuevo plan de acción.
El reglamento de la Convención Internacional para la Prevención de la Contaminación por Embarcaciones (MARPOL) de la organización prohíbe el vertido de plásticos en el mar y obliga a los gobiernos a garantizar la disponibilidad de instalaciones portuarias adecuadas para recibir los desechos de los buques.
