Donald Trump le cumple a la clase obrera de su país la promesa de retirar a los Estados Unidos del TPP (Tratado de comercio del pacífico). El tratado, donde 11 grandes economías planean disminuir hasta el punto de erradicar la tributación de los bienes comercializados, se ve ahora en aprietos por la salida de los Estados Unidos. No obstante, ya habiendo sido ratificado por Japón y su apoyo por el país Chino no significa que globalmente se cancele. Adicional a esta medida, Trump también menciona la revisión que se le avecina al NAFTA (Tratado de comercio de Norte América) donde México se afectaría en gran medida.
En el caso de Colombia, al no haber sido incluido en la negociación, esta medida favorece enormemente ya que al año de haber entrado en vigor, las exportaciones a los Estados Unidos hubieran sufrido una caída considerable.
Los sectores más afectados en cuanto al comercio con USA eran el del petróleo y la minería principalmente y posteriormente el de los alimentos, bebidas y tabaco, minerales no metálicos y otras manufacturas. Finalmente, y con menor afectación aparece también la agricultura, caza, pesca, metales y productos derivados.
Ahora bien, Colombia podría aprovechar la mentalidad proteccionista de Trump al retirarse TPP y a futuro ahogar el NAFTA ya que con esto busca desbalancear la balanza comercial de países que venden a grandes escalas a los Estados Unidos.
