En un informe financiero reciente, la naviera israelí ZIM reveló una pérdida neta sustancial de USD 2.7 mil millones para el año fiscal 2023, atribuida principalmente a cargos por deterioro significativos incurridos durante el tercer trimestre. A pesar de este contratiempo, la compañía logró mitigar sus pérdidas en el cuarto trimestre a USD 147 millones, alimentando el optimismo de una posible reversión en la rentabilidad para el año 2024.
La naviera experimentó un notable descenso en los ingresos, cayendo un 59% a USD 5.2 mil millones a lo largo del año. Las pérdidas operativas, medidas por el EBIT ajustado, ascendieron a USD 422 millones anuales, con una pérdida de EBIT de USD 49 millones en el último trimestre. Sin embargo, ZIM mantiene la esperanza de una mejora en el rendimiento financiero en el próximo año, proyectando un EBIT ajustado que oscila entre USD -300 millones y USD 300 millones positivos.
Anticipando un impulso a partir de las tarifas elevadas derivadas del conflicto en el Mar Rojo, ZIM prevé una situación financiera más sólida en los dos primeros trimestres de 2024. Sin embargo, la empresa reconoce posibles desafíos en la segunda mitad del año si la crisis se resuelve para entonces. En medio de estas proyecciones, ZIM subraya la importancia de la preservación de efectivo, destacando la devolución de tonelaje fletado como una estrategia clave. Tanto en 2023 como en 2024, la empresa devolvió 32 buques, con otros 37 programados para renovación en 2025.
Con casi el 96% de su flota en fletamento, ZIM lucha con las altas tarifas de arrendamiento heredadas firmadas durante la pandemia de COVID-19. Las tarifas promedio por unidad equivalente a veinte pies (TEU) cayeron un 63% en 2023, pasando de USD 3,240 a USD 1,203. Si bien los volúmenes anuales se mantuvieron estables en 3.28 millones de TEU, se observó una disminución en el cuarto trimestre, con envíos que cayeron a 786,000 TEU en comparación con los 823,000 TEU del año anterior.
La pérdida neta sustancial del año se debió principalmente a un cargo por deterioro de USD 2.06 mil millones en activos incurrido durante el tercer trimestre, sin costos adicionales por deterioro registrados en el cuarto trimestre. Mirando hacia adelante, ZIM espera volver a ser rentable a partir de 2025 en adelante, impulsado por menores costos por TEU resultantes de futuras construcciones.
A pesar de una disminución del 3% en los TEU transportados en 2023, por debajo del promedio del mercado, ZIM tiene como objetivo un crecimiento de volumen de dos dígitos en 2024. La compañía planea lograr esto mediante el despliegue de buques de mayor tamaño en varias rutas comerciales, con un enfoque particular en atraer nuevos clientes en Estados Unidos a través de servicios de propulsión de gas natural licuado (GNL) destinados a reducir las emisiones de carbono. Las áreas de crecimiento objetivo incluyen el comercio transpacífico, Asia-Costa Este de Estados Unidos y América Latina, junto con los servicios de retorno de Estados Unidos a Asia. Además, ZIM tiene como objetivo expandir su flota operada en un porcentaje de dos dígitos en 2024, lo que indica confianza en sus iniciativas estratégicas en medio de condiciones de mercado desafiantes.
Fuente: ZIM, Alphaliner
