La industria petrolera se ha visto envuelta en una aguda aversión al riesgo en los sectores financiero y naviero después de que varias naciones, entre ellas Estados Unidos, sancionaran a múltiples entidades rusas tras la invasión rusa de Ucrania, aunque Washington ha eximido explícitamente a los productos energéticos de las medidas rusas.
El crudo Brent superó el miércoles los 112 dólares por barril, el nivel más alto desde 2014, desoyendo las noticias de que varios países desarrollados planean liberar un récord de 60 millones de barriles de reservas estratégicas de petróleo para enfriar los precios.
El diferencial de precios para el crudo Brent entregado entre ahora y dentro de 12 meses está en 21,54 dólares el barril, el más pronunciado de la historia, mientras que la prima del Brent con respecto al Dubai -el diferencial de precios entre los grados dulces y amargos- alcanzó un máximo histórico de 12,93 dólares el barril el miércoles, dijo un operador.
Esto ha impulsado la demanda de crudo de Oriente Medio, y los precios de referencia han alcanzado máximos históricos a principios de marzo, con una subida de más del 50% respecto al mes pasado.
La dispersión de los precios de referencia, junto con el aumento de los fletes de los petroleros en todo el mundo, también ha encarecido la compra de petróleo de Europa, África y Estados Unidos por parte de los compradores asiáticos, reduciendo sus opciones.
Se espera que los refinadores de Asia y Europa busquen más suministros de Oriente Medio y Estados Unidos para sustituir el crudo de Rusia y Asia Central, según las fuentes, incluso cuando los precios de venta oficiales del crudo saudí van a alcanzar máximos históricos en abril.
«Los fletes de Oriente Medio a Asia también son más altos, así que depende de cuál sea más doloroso», dijo un comerciante con sede en Singapur. «Los fletes en todas partes están aumentando, además el Brent-Dubai es muy amplio. Hasta cierto punto, el arbitraje hacia Asia se verá afectado».
Los compradores de petróleo ruso tuvieron dificultades para conseguir financiación, ya que los principales bancos dejaron de emitir garantías de crédito. El descuento del crudo ruso de los Urales con respecto al Brent es el más amplio de su historia, mientras que las primas de los crudos rusos ESPO y Sokol exportados a Asia se han desplomado.
Los fletes de los petroleros de todo el mundo también se han disparado, especialmente los de los que hacen escala en los puertos del Mar Negro y Turquía, lo que podría interrumpir las exportaciones de CPC Blend de Kazajstán y Azeri Light de Azerbaiyán.
Las empresas comerciales probablemente tendrán que utilizar buques cisterna fletados a largo plazo para transportar estos cargamentos, dijo un comerciante de petróleo de alto nivel en Singapur.
«Los armadores se lo están pasando en grande», dijo.
Al no tener acceso a sus fuentes de suministro habituales, es probable que Asia y Europa aumenten sus importaciones de América, según los comerciantes y analistas.
Sin embargo, las ofertas de crudo estadounidense Mars y West Texas Intermediate para entrega en mayo se han triplicado con creces, hasta situarse en 14 y 16 dólares el barril por encima de las cotizaciones de Dubai, respectivamente, según los operadores, lo que ha dejado de lado a los compradores asiáticos.
«El reciente rendimiento superior del Brent en relación con el WTI, impulsado por la geopolítica, significa que la referencia norteamericana tiene que ponerse al día para cerrar la puerta a las exportaciones, dado que los balances estadounidenses son ajustados, en particular con Cushing acercándose a los fondos de los depósitos operativos», dijo el analista de RBC Capital Mike Tran en una nota.
Las existencias de crudo en el centro de almacenamiento de Cushing, Oklahoma, han caído a su nivel más bajo desde septiembre de 2018.
