Venezuela cuenta con 197 mil millones de pies cúbicos de reservas probadas de gas natural (GNL), ubicándose en el octavo país con mayores reservas de GNL, así como con los mayores yacimientos de petróleo del mundo. Así, Venezuela busca reactivar las exportaciones de gas por gasoducto a Colombia.
Venezuela analiza reactivar un gasoducto abandonado en el occidente del país para exportar gas natural, según Juan Ricardo Ortega, responsable del Grupo Energía Bogotá (GEB). La empresa estatal Petróleos de Venezuela, Pdvsa, espera reactivar un gasoducto de 224 kilómetros que conecta los campos de gas de Venezuela con el noreste de Colombia.
Ortega dijo que fue abordado por un emisario de personas que estudiaban la factibilidad del proyecto, quienes le preguntaron sobre la posibilidad de utilizar la red de gasoductos del GEB para distribuir el gas dentro de Colombia.
“Como transportistas tenemos la infraestructura que podría llevar este gas al mercado y estamos más que interesados en lo que está pasando”, dice Ortega el lunes pasado en entrevista con Bloomberg. “Hay muchas actividades que podrían hacer la transición al gas en Colombia si tuvieras la confiabilidad y el precio justo”.
PDVSA no respondió a los mensajes en busca de comentarios.
La reapertura de la infraestructura, conocida como gasoducto transcaribeño Antonio Ricaurte, podría ayudar a Venezuela a recuperarse de la crisis económica y reducir el riesgo de escasez de gas en Colombia en 2025 o 2026. Venezuela tiene 197 mil millones de pies cúbicos de reservas probadas de gas natural , el 8º país con mayores reservas de GNL, así como con los mayores yacimientos de petróleo del mundo.
GEB, propiedad de la ciudad de Bogotá en un 65,7%, podría ayudar a realizar las reparaciones necesarias para que el gasoducto funcione.
Si se llega a un acuerdo, tendría que recibir luz verde del Tesoro de EE. UU., ya que la empresa estatal venezolana Pdvsa aún está sujeta a sanciones.
Washington negocia con el gobierno venezolano del presidente Nicolás Maduro desde la invasión rusa a Ucrania en la que Estados Unidos había intentado garantizar el suministro energético en medio de la interrupción provocada por el conflicto.
El proyecto podría marcar la restauración de las brechas energéticas entre Bogotá y Caracas en un momento en que el presidente colombiano entrante, Gustavo Petro, y Maduro se preparan para abrir fronteras y reanudar el comercio después de años de hostilidad entre los países. Petro asumirá la presidencia el 7 de agosto.
Petro ha prometido eliminar los combustibles fósiles, pero parece favorecer el gas sobre el petróleo y el carbón. El ministro de Hacienda entrante, José Antonio Ocampo, declaró el mes pasado al Financial Times que el gas natural podría servir como fuente de energía en la transición del país hacia las energías renovables.
SWAP de gas entre Colombia y Venezuela
Según Portafolio, Colombia tenía firmado un acuerdo de canje entre ambos países, en el que el primero en entregar el combustible era Colombia, tarea que inició el 1 de diciembre de 2008 hasta el 31 de diciembre de 2015, con despachos entre 0,5 y 0,7 billones de terapias cúbicas de este combustible.
Por su parte, Venezuela tuvo que hacer lo mismo desde el 1 de enero de 2016, hasta el 31 de diciembre de 2024, y cuyo combustible se esperaba en Campo Ballena, pero hasta el cierre no ha sucedido, primero por las diferencias políticas, la lo que resume la caída en la producción de hidrocarburos en el país.
Invasión Rusa
El gasoducto fue inaugurado en 2007 por los expresidentes Hugo Chávez y Álvaro Uribe, pero está inactivo desde 2015. Se extiende desde Riohacha, en el departamento colombiano de La Guajira, hasta el estado de Zulia, en el occidente de Venezuela. Pdvsa pagó unos US$335 millones por su construcción.
Los precios del gas natural se han disparado en Europa en las últimas semanas debido al corte del suministro ruso a raíz de las fricciones provocadas por su invasión a Ucrania. Colombia no corre el riesgo de depender excesivamente del gas extranjero, ya que utiliza energía hidroeléctrica limpia para la mayor parte de su generación eléctrica, dijo Ortega.
Colombia produce más de las dos terceras partes de su electricidad con energía hidroeléctrica, pero con frecuencia aumenta la generación de gas y carbón en épocas secas.
Fuente: Bloomberg – La República – Portafolio